Como ya habéis podido comprobar, al cole no venimos simplemente a "hacer fichas". ¡Nuestros momentos prestosos van mucho más allá!
Como sabéis, estamos trabajando el otoño. Estamos viendo como diferentes artistas lo plasmaban en sus obras de arte, pero también lo queremos oler, tocar, ver...¡y comer!. Por ello, hemos montado un pequeño rincón con frutos del otoño. Pero no se trataba simplemente de verlo, había que tocarlo y exprimirlo ¡al máximo!
- Probamos una granada
(que aunque al principio más de uno pensaba que Granada era un equipo de fútbol, jj...)
- La berenjena no tenia muy buena pinta... Y además Yael nos contó que se come cocinada, asi que mejor simplemente tocarla, olerla (no olía nada bien) y ver su color.
- Llegó el turno de la calabaza. De momento solo la hemos mirado y cogido para ver lo que pesaba. También pensamos cómo será por dentro, pero de momento la hemos dejado en el rincón (otros frutos se ponen pochos más pronto, pero la calabaza se mantiene).
También la mandarina, la manzana (teníamos una de cada color)...
- Yael, que es todo un experto en el tema, también nos dijo que el membrillo no se comía así crudo, que lo mejor era cocinarlo. Con azúcar y unas horas de calorcito en la olla, tendremos un rico dulce!
- ¡El caqui si que ha sido todo un descubrimiento! La profe, con toda la sinceridad, nos dijo que a ella no le gustaba mucho esta fruta. Pero esto no fue un impedimento para que todos toditos lo quisieran probar y ¡muchos repetir! Estaba tan madurito y tan dulce que era irresistible!
Y después de este empacho de frutas y frutos (y otras muchas de las que no tenemos prueba gráfica...), hicimos una gran clasificación, en mural realizado entre tod@s, diferenciando entre frutos secos y frutos carnosos.
Posteriormente, cosimos nuestras propias cestitas, recortamos un montón de frutos y los clasificamos en cada una de ellas.
Aquí os dejo algunas fotos de estos momentos. En los próximos días añadiremos algunas más que se nos quedaron en el tintero.
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